tag:blogger.com,1999:blog-19938458065033647842024-03-08T10:14:58.426-08:00Antología de poesía filipina / Anthology of Filipino poetry 1593-2009Antolohia ng tulang pilipino/Antolohiya sa mga pilipinhong balak/Antolohia dagiti dandaniw ti filipino/Antolohiya sang mga binalaybay ñga filipinhonfonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.comBlogger31125tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-81826893212352717292016-08-17T15:00:00.000-07:002016-08-17T15:00:41.678-07:00A mi calle ilonga, de Guillermo Gómez-Rivera<br />
Vetusta rúa de cansados sueños,<br />
del<i> Bilibid </i>y parques sin verdor,<br />
de casas solariegas sin sus dueños,<br />
de acacias milenarias sin color.<br />
<br />
Te vio mi adolescencia alegre y bella<br />
avenida de recuerdos y desfiles.<br />
Ahora te añoro por guardar la huella<br />
de amores santos y ósculos gentiles.<br />
<br />
Calesas, calesines y carruajes<br />
cabalgaron ayer sobre tu lomo.<br />
Hoy carros de chirriantes engranajes<br />
transitan sin corcel ni mayordomo.<br />
Las damas con sombreros y plumajes<br />
¡se perdieron en vehículos de plomo!<br />
<br />
Iloílo, 10 de enero de 1957fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-81659103906548254552009-04-27T07:59:00.000-07:002009-05-01T08:37:15.063-07:00Socorro, de Edwin Agustín LozadaOh poeta, ven, te pido socorro.<br />Aclárame este dolor que yo siento.<br />Yo no sé si es azul, violeta o púrpura,<br />si viene, ay, de las noches perdidas,<br />espesas y ahogadas en el profundo<br />mar que atormenta mi paz temerosa,<br />frágil, tan inestable y angustiada,<br />o si viene del viento sanguinario<br />de la cruel verdad que me sigue espiando,<br />pero no se muestra y no me confiesa<br />lo que oculta, guarda y calla en sus ojos<br />negros, opacos, fríos, solitarios.<br /><br />Poeta, profeta de los corazones,<br />mago que del caos de los sentimientos<br />plasmas y das vida a lo fugitivo,<br />a lo incomprensible y a lo confuso<br />con tus palabras, luciérnagas que<br />dan señales de vida y esperanza,<br />belleza y alegría, claridad<br />donde ha desaparecido la luz<br />volátil que tanto nos hace falta.<br />¡Poeta, consuélame con tus luciérnagas,<br />pequeñas estrellas, tan delicadas,<br />pero en mi alma, potentes como el sol!<br /><br />2003fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-28418790607330318112009-04-16T14:34:00.000-07:002009-04-16T14:55:22.171-07:00Mi último adiós, de José Rizal¡Adiós, patria adorada, región del sol querida<br />perla del mar de oriente, nuestro perdido Edén!<br />A darte voy alegre la triste mustia vida<br />y fuera más brillante, más fresca, más florida<br />también por ti la diera, la diera por tu bien<br /><br />En campos de batalla, luchando con delirio<br />otros te dan sus vidas sin dudas, sin pesar<br />el sitio nada importa, ciprés, laurel o lirio<br />cadalso o campo abierto, combate o cruel martirio<br />lo mismo es si lo piden la patria y el hogar<br /><br />Yo muero cuando veo que el cielo se colora<br />y al fin anuncia el día tras lóbrego capuz;<br />si grana necesitas para teñir tu aurora<br />vierte la sangre mía, derrámala en buen hora<br />y dórela un reflejo de su naciente luz.<br /><br />Mis sueños cuando apenas muchacho adolescente<br />mis sueños cuando joven ya lleno de vigor<br />fueron el verte un día, joya del mar de oriente<br />secos los negros ojos, alta la tersa frente<br />sin ceño, sin arrugas, sin manchas de rubor<br /><br />Ensueño de mi vida, mi ardiente vivo anhelo<br />¡Salud te grita el alma que pronto va a partir!<br />¡Salud! Ah, que es hermoso caer por darte vuelo<br />morir por darte vida, morir bajo tu cielo<br />y en tu encantada tierra la eternidad dormir<br /><br />Si sobre mi sepulcro vieres brotar un día<br />entre la espesa yerba sencilla, humilde flor<br />acércala a tus labios y besa el alma mía<br />y sienta yo en mi frente bajo la tumba fría<br />de tu ternura el soplo, de tu hálito el calor<br /><br />Deja a la luna verme con luz tranquila y suave<br />deja que el alba envíe su resplandor fugaz<br />deja gemir al viento con su murmullo grave<br />y si desciende y posa sobre mi cruz un ave<br />deja que el ave entone su cántico de paz<br /><br />Deja que el sol, ardiendo, las lluvias evapore<br />y al cielo tornen puras con mi clamor en pos;<br />deja que un ser amigo mi fin temprano llore<br />y en las serenas tardes cuando por mí alguien ore<br />¡Ora también, oh Patria, por mi descanso a Dios!<br /><br />Ora por todos cuantos murieron sin ventura<br />por cuantos padecieron tormentos sin igual<br />por nuestras pobres madres que gimen su amargura<br />por huérfanos y viudas, por presos en tortura<br />y ora por ti que veas tu redención final<br /><br />Y cuando en noche oscura se envuelva el cementerio<br />y solos sólo muertos queden velando allí<br />no turbes su reposo, no turbes el misterio<br />tal vez acordes oigas de cítara o salterio<br />soy yo, querida patria, yo que te canto a ti<br /><br />Y cuando ya mi tumba de todos olvidada<br />no tenga cruz ni piedra que marquen su lugar<br />deja que la are el hombre, la esparza con la azada<br />y mis cenizas, antes que vuelvan a la nada,<br />el polvo de tu alfombra que vayan a formar<br /><br />Entonces nada importa me pongas en olvido<br />tu atmósfera, tu espacio, tus valles cruzaré<br />vibrante y limpia nota seré para tu oído<br />aroma, luz, colores, rumor, canto, gemido<br />constante repitiendo la esencia de mi fe<br /><br />Mi patria idolatrada, dolor de mis dolores<br />querida Filipinas, oye el postrer adiós<br />ahí te dejo todo, mis padres, mis amores<br />voy donde no hay esclavos, verdugos ni opresores<br />donde la fe no mata, donde el que reina es Dios<br /><br />Adiós padres y hermanos, trozos del alma mía<br />amigos de la infancia en el perdido hogar<br />dad gracias que descanso del fatigoso día<br />adiós dulce extranjera, mi amiga, mi alegría<br />adiós queridos seres, morir es descansar<br /><br />1896fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-62244725577818523452009-02-20T12:34:00.000-08:002009-02-20T12:39:03.040-08:00A España, de Rosario DayotCon lealtad y gratitud sincera<br />unida a ti por irrompible lazo<br />el alma filipina, en tu regazo<br />pone un beso de amor en tu bandera<br /><br />Perdónala si evoca plañidera<br />de tu recuerdo el indeleble trazo<br />oh cuán dulce calor el de tu abrazo<br />para el que sufre en angustiosa espera<br /><br />Mas... escucha sus votos inmarchitos.<br />Ni del tiempo los cursos infinitos<br />ni el nuevo rumbo de tutela extraña<br /><br />extinguirán en tierra filipina<br />la fe en tu amor, la fabla cervantina<br />ni este grito supremo: ¡Viva España!<br /><br />1922fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-25469671369697966262009-02-18T17:02:00.000-08:002012-10-25T13:21:16.457-07:00A España, de Flavio Zaragoza CanoEspaña, nación gigante<br />cuyo poder sin segundo<br />un tiempo sostuvo el mundo<br />con las fuerzas de un atlante.<br />De mi lira de diamante<br />hoy brotan a tu memoria<br />las epopeyas de gloria<br />que admiró muda la tierra<br />cuando eras diosa de guerra<br />y emperatriz de la historia<br /><br />Nadie humilló tu grandeza<br />ni violó tu independencia<br />porque el hierro de la ciencia<br />fue tu escudo de nobleza.<br />Cuando con torpe braveza<br />te hirió la gálica fiera<br />no pudo el ave guerrera<br />rasgar tu rojo estandarte<br />¡y el astro de Bonaparte<br />cayó al pie de tu bandera!<br /><br />Con el libro y con la espada<br />de hemisferio en hemisferio<br />tuviste bajo tu imperio<br />la humanidad dominada,<br />y la tierra conquistada<br />fue por tus bravas legiones<br />cuando al llevar tus pendones<br />los adalides hispanos<br />cruzabas los oceanos<br />con tus Gamas y Colones<br /><br />Así cruzaste los mares<br />con tu enseña vencedora,<br />que brillaba como aurora<br />de amor en extraños lares.<br />En montañas y en hogares<br />en el mar y en el boscaje<br />te dio el mundo vasallaje<br />y tu le diste tus ciencias<br />y la flor de tu lenguaje<br /><br />Tus genios como titanes<br />del humano pensamiento<br />son soles del firmamento<br />y en la tierra son volcanes.<br />Colón, Vasco y Magallanes<br />almas grandes y divinas<br />las latitudes marinas<br />cruzaron con brava hazaña<br />llevando el pendón de España<br />de América a Filipinas<br /><br />Jamás con garra sangrienta<br />extendiste tu dominio<br />que torpe sed de exterminio<br />tu corazón nunca alienta.<br />Tu magno poder se asienta<br />sobre un trono duradero.<br />Tras el fragor del acero<br />desde el Mayón a los Andes<br />tus hijos libres y grandes<br />recuerdan tu amor sincero<br /><br />Hoy que nuevos invasores<br />pretenden romper el lazo<br />que en estrechísimo abrazo<br />une tan grandes amores<br />tu nombre en nuestros dolores<br />es vida y es acicate.<br />Y cuando el canto del vate<br />haga latir nuestro pecho<br />con la espada del Derecho<br />sostendremos el combate<br /><br />Nunca podrá la absorbente<br />fuerza de las nuevas huellas<br />oscurecer tus estrellas<br />que brillan en nuestra mente.<br />Escrito está en nuestra frente<br />tu recuerdo soberano<br />y al recabar del tirano<br />nuestra sacra independencia<br />lo haremos con elocuencia<br />en lenguaje castellano<br /><br />Y aún hay almas ingratas<br />que olvidando tu ternura<br />manchan con su baba impura<br />el amor con que nos atas.<br />Mas son en tu pecho innatas<br />la bondad y la hidalguía<br />y hoy que a relucir vuelve el día<br />tras la noche del olvido<br />el pueblo de gozo henchido<br />te llamará: ¡Madre mía!<br /><br />¡Madre, sí! Porque nos diste<br />con la luz del primer beso<br />la alborada del progreso<br />que en nuestras tierras pusiste.<br />El pueblo agobiado y triste<br />por sus sueños no cumplidos<br />con tus recuerdos queridos<br />hace un broquel soberano.<br />¡Y hablamos en castellano<br />para no ser absorbidos!<br /><br />1923fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-56152077689842397462009-02-18T16:39:00.000-08:002010-10-13T16:44:43.406-07:00Blasón, de Jesús BalmoriSoy un bardo indohispano. En mi pecho cristiano<br />mi corazón es vaso donde mezclada está<br />la sangre de Legazpi, el capitán hispano<br />con la sangre tagala de la hija del Rajah<br /><br />Con el talón hundido en olas y en espumas<br />esperé sobre el mar el galeón español<br />y España, al encontrarme, besó las rojas plumas<br />que en mi frente temblaban como rayos de sol<br /><br />Era hermosa, era buena, era plena de amores<br />puse a sus pies mis lanzas, mis espigas, mis flores<br />le di mi corazón salvaje y oriental<br /><br />Y desde entonces va en mi pecho desnudo<br />sirviéndome de férreo y de glorioso escudo<br />con su idioma divino y su sangre inmortalfonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-8303266046762337432009-02-18T13:05:00.000-08:002009-02-18T13:13:36.799-08:00A Magallanes, en el cuarto centenario del descubrimiento de Filipinas, de Enrique Fernández LumbaEn vano tu recuerdo y tu nombre esclarecidos<br />indignas almas viles intentan olvidar<br />los signos de tu gloria quedaron esculpidos<br />en páginas eternas del libro universal<br /><br />Jamás el hombre aleve podrá borrar la estela<br />que tus sencillas naves dejaron en el mar<br />el genio de la historia por tu recuerdo vela<br />y tu glorioso nombre los siglos guardarán<br /><br />La noche del olvido no puede con sus brumas<br />de tu memoria egregia las luces apagar<br />constante el mar azota las peñas y en espumas<br />tan solo se convierte su furia pertinaz<br /><br />No en vano con tus naves cargadas de nobleza<br />de todo lo sublime que Iberia pudo dar<br />venciste los embates del mar y su fiereza<br />trayendo con tu espada la cruz y la verdad<br /><br />Tu gloria es como el astro que intenso resplandece<br />mirar tal vez no quieran su bello fulgurar<br />pero su clara lumbre ni muere ni decrece<br />y en los espacios célicos luciendo siempre está<br /><br />Mi débil voz te anuncia que tu gloriosa hazaña<br />trayendo a Filipinas ¡a mi adorado lar!<br />la lengua de Castilla, la fe de aquella España<br />los buenos filipinos jamás olvidarán<br /><br />En vano la desidia pretenderá olvidarte<br />que el eco de tu nombre resuena sin cesar<br />se oye entre las ruinas que sirven de baluarte<br />a un ayer glorioso que nunca cederá<br /><br />lo lleva entre los labios el hijo de esta tierra<br />nombrar a Filipinas tu nombre es pronunciar<br />si el tiempo borra un día la losa que te encierra<br />no temas, pues tu nombre jamás se perderá<br /><br />Después de cuatro siglos aún tu gloria existe<br />aún recuerda el pueblo tu hazaña singular<br />que el tiempo ni los hombres la sangre que vertiste<br />borrar no pueden ellos del suelo de Mactán<br /><br />¡Oh insigne Magallanes, bendita tu memoria!<br />¡Bendito aquel instante cuando cruzaste el mar<br />trayendo a estas regiones un nombre y una historia<br />y con la cruz de Cristo la luz de la verdad!<br /><br />1921fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-89056196249380120942009-02-18T06:26:00.000-08:002012-10-25T13:28:58.028-07:00A la raza hispana, de Flavio Zaragoza Cano<a href="http://www.youtube.com/watch?v=Npdg2qhz7Eg"></a>I<br /><br />Noble raza inmortal, raza divina<br />que hablas el dulce idioma de Castilla<br />triste y altiva, mi alma filipina<br />ante tu altar sagrado se arrodilla<br /><br />Amo a mi patria mas el sacro rayo<br />de mi amor puro no es para ella sola<br />que si como patriota soy malayo<br />como poeta ¡mi alma es española!<br /><br />Y lo proclamo así, sin cobardía.<br />Amo a España que me dio cultura.<br />La gratitud es flor del alma mía<br />y mi alma no es ingrata ni es impura<br /><br />Mi amor a España Dios ha bendecido<br />y no es traición para mi propia tierra<br />porque en mi corazón que odia el olvido<br />si es noble y santo todo amor se encierra<br /><br /><br />II<br /><br />Hoy que muchos claudican yo te canto<br />gran raza hispana, tu renombre eterno<br />vive en mi lira en medio del quebranto<br />con que sufrimos el dogal moderno<br /><br />Si todos ya olvidaron el aroma<br />de tu seno prolífico y fecundo<br />aún quedo yo, soldado de tu idioma<br />para cantar tus glorias en el mundo<br /><br />No soy de ese linaje de chacales<br />que nacidos de páramos incultos<br />al recibir tus besos maternales<br />tu dulce amor pagaron con insultos<br /><br />Los que ayer te ensalzaron hoy te olvidan<br />¡corifeos del nuevo coloniaje!<br />mientras extrañas águilas anidan<br />en el bello jardín de tu lenguaje<br /><br /><br />III<br /><br />Noble raza que sufres con grandeza<br />las épicas tragedias del presente<br />yo te amo y respeto la tristeza<br />que brilla en las arrugas de tu frente<br /><br />Y si ayer contra ti tenido hubiera<br />que ir a la lucha por la patria mía<br />nunca hubiese manchado tu bandera<br />y en medio de mis triunfos ¡te amaría!<br /><br />De tu amor maternal la firme esencia<br />no olvidará la tierra panayana<br />que al gritar <em>libertad</em> e <em>independencia<br /></em>¡siempre hablamos la lengua castellana!<br /><br />Cuando te olviden todos, mi alma fuerte<br />pregonará tu honor de polo a polo.<br />Yo hablaré tu lenguaje hasta la muerte.<br />Si nadie te ama ya ¡te amaré solo!<br /><br />1933fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-15719188018442076382009-02-16T15:53:00.000-08:002009-02-16T17:59:52.690-08:00Díptico, de Edilberto LazcanoI<br /><span style="font-size:130%;">La campana</span><br /><br />¡Oh España de sin par ejecutoria<br />que a tu cabeza unciste el universo!<br />Del sol de tu poder radiante y terso<br />hoy solo queda pálida memoria.<br />Mas ya hundida la torre de tu historia<br />bajo las olas de un olvido adverso<br />aún repica sonora como el verso<br />la campana gloriosa de tu gloria.<br />En el templo ideal del alma humana<br />es tu lenguaje esa inmortal campana<br />y es de su voz el eco soberano<br />la virtud de cien pueblos diferentes<br />para avanzar, seguros y valientes<br />por la ancha vía del progreso humano<br /><br /><br /><br />II<br /><span style="font-size:130%;">Ramo desgajado </span><br /><br />No lamentes, España, tu caída<br />si te hirió con su hachazo el elemento.<br />También lograste que impregnase el viento<br />la rica esencia que exhaló tu herida.<br />Y del árbol herido de tu vida<br />un ramo en flor se desgajó violento<br />que fue rodando a merced del viento<br />hasta hundirse en la mar embravecida.<br />Pero al cogerlo Dewey de la playa<br />vio que era un gajo de la mar malaya<br />florecido de perlas peregrinas.<br />El que se desgajó de tu existencia<br />llevándose tu amor, tu fe, tu esencia<br />el ramo en flor: mi patria, Filipinas<br /><br />1922fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-19207546257043624262009-02-16T15:39:00.000-08:002009-02-16T15:45:50.304-08:00Melancolía, de Francisco ZaragozaEn las serenas aguas de los lagos<br />hay como una sutil melancolía<br />nostalgia de pretéritos halagos<br />de recuerdos...de amor...de lejanía...<br /><br />Reflejan mis ensueños de otros días<br />como en mudos espejos delirantes,<br />la historia de mis ansias y alegrías...<br />¡el fulgor de sus ojos inquietantes!<br /><br />¡No sé qué oculta relación alienta<br />entre mi alma y el místico paisaje<br />que su melancolía en mí fermenta<br />como un acto de extraño vasallaje!<br /><br />¡Cuántas veces las aguas adormidas<br />en que el misterio señaló sus huellas<br />retrataron unidas nuestras vidas<br />bajo el conjuro astral de las estrellas!<br /><br />Flota en el aire un halo de tristeza<br />que comunica un íntimo mensaje.<br />El alma entera se arrodilla, y reza<br />la oración desgarrada del paisaje<br /><br />Desfilan ante mí, mudas, cansadas<br />las horas sin pasión y sin ternura<br />vacías, como antorchas apagadas<br />frías, como olvidada sepultura<br /><br />Al contemplar el panorama incierto<br />que una inquietud de lobreguez reviste<br />se dijera la cámara de un muerto<br />¡eternamente desolada y triste!fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-35232797831874181342009-02-16T15:31:00.000-08:002009-02-16T15:36:31.611-08:00Romance de la cita desdichada, de Federico Espino LicsiSigue el viaje de la Luna.<br />Sigue la secreta cita.<br />Mozuelo alto, moza baja y un verde rumor de brisa.<br />Arde el mozuelo fornido<br />hundido en la íntima sima<br />el pez de su amor cambiándose<br />en una rosa encendida.<br />Y la luna pudorosa<br />quiere esfumarse de prisa.<br />En el silencio sangriento<br />qué meloso es el descanso<br />cuando la flor se marchita.<br />De repente, tres mozuelos<br />hermanos de la mocita<br />con fríos cuchillos entran<br />en el lugar de la cita.<br />Es ágil la venganza<br />en la selva filipina<br />y mientras la Luna asoma<br />tras las nubes blanquecinas<br />la rosa sangra en el suelo<br />sin pétalos, sin espinasfonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-6399745478068656632009-02-16T15:12:00.000-08:002009-02-16T15:28:18.534-08:00Emilio Jacinto, de Zoilo J. Hilario¡Héroe: gloria a ti! Rosas, frescas y tiernas rosas<br />sobre tu tumba sacra, las hadas cariñosas<br />amigas de bravos héroes ofrendan con amor<br />mientras tu amada Patria te rinde en sus altares<br />el suave y dulce aroma de los ricos solares<br />de las islas Visayas, Mindanaw y Luzón<br /><br />¡Vives, patriota egregio! Trompetas y clarines<br />ya pregonan tu nombre en todos los confines<br />de este codiciado huerto del extremo oriental<br />y en el ara del Templo de la divina Gloria<br />te colocan, unánimes, la justiciera Historia<br />y la santa mil veces conciencia popular<br /><br />¡Oh paladín que en medio del épico combate<br />soñaste para el pueblo, a manera de un vate<br />en auroras de triunfo, de libertad y redención.<br />Vibra tu nombre en hojas del libro de inmortales<br />con los de nuestros Burgos, Zamoras y Rizales<br />para pasmo del déspota y del hermano honor!<br /><br />Fue tu amor a la patria sublime fanatismo<br />y en tu odio soberano contra el viejo despotismo<br />dieron su fuego a tu alma el Mayon y Taal.<br />Tu valor solo cabe en los hidalgos pechos<br />y en el cruento combate por los patrios derechos<br />fue un sol en tus palabras: ¡Sucumbir o matar!<br /><br />Te hirieron en el muslo en la roja contienda<br />las armas defensoras de la extranjera tienda<br />en los campos históricos de nuestra rebelión.<br />Mas ¡qué importa? Te hirieron, oh héroe, dándote gloria<br />porque quien cae herido en honor de la Historia<br />se levanta después como un radiante sol!<br /><br />Heredaste tu sangre del inmortal ancestro<br />oh héroe del Katipunan, querido hermano nuestro<br />sangre de Maguinoos y de invictos rajáhs.<br />Sus glóbulos hirvientes, hecho ya tu heroísmo<br />convirtiéronse en cálidas flores de patriotismo<br />y en constantes ensueños de eterna libertad<br /><br />No fuiste solo héroe del legendario bolo<br />cuyas grandes hazañas se oyen de polo a polo<br />sino diestro soldado de la pluma también<br />que sabe hacer temblar a los mismos monarcas<br />y césares que explotan las fabulosas arcas<br />de los pueblos sujetos al coloniaje cruel<br /><br />Fuiste también poeta, porque las dulces diosas<br />de nuestras selvas vírgenes y montañas hermosas<br />imprimieron sus besos sobre tu honrada sien.<br />Bebiste en bellas ánforas suaves inspiraciones<br />y en las notas nostálgicas de tus tristes canciones<br />cantabas a la patria diosa de tu querer<br /><br />Ser poeta es una de esas soberanas grandezas<br />mucho más bellas que todas las noblezas<br />de aquella aristocrática Edad Medioeval<br />porque los dulces sabios en melódicos cantos<br />son tan solo en la tierra apenas unos cuantos<br />amados del gran Dios todo amor y bondad<br /><br />Consejero sublime del inmortal e ilustre<br />Bonifacio de historia llena de gloria y lustre<br />apóstol y guerrero, trovador y escritor.<br />¿Qué importa si en su fosa la muerte ya te encierra?<br />Cual Jesucristo a Lázaro, tu idolatrada tierra<br />te dice: ¡resucítate! y te alzas como un dios!<br /><br />¡Gloria a ti, héroe Jacinto! Rosas todas divinas<br />con tus hadas amigas, las almas filipinas<br />ponen sobre tu tumba con un sublime amor<br />mientras tu amada patria, al rendirte su culto<br />a ti que enviaste al déspota maldición e insulto<br />¡ratifica sus ínclitos sueños de redención!<br /><br />1914fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-18269531583837806212009-02-16T15:07:00.000-08:002009-02-16T15:11:35.054-08:00Homenaje, de Dalmacio H. Balagtás<em>A Salvador Rueda</em><br /><br />Embajador poeta que vienes a esta tierra<br />donde flameó un dia la enseña roja y gualda<br />toma las galas todas que mi solaz encierra<br />y danos de tus rimas la perennal guirnalda<br /><br />De tus gloriosos versos la prodigiosa alquimia<br />afianzará los vínculos de nuestra antigua alianza<br />que no en balde parlamos la hispana lengua eximia<br />y bruñó el sol nativo del <em>quijote</em> la lanza<br /><br />No morirá en mi tierra la lengua de Castilla<br />la cultura española no encontrará su ocaso<br />las leyes del Rey Sabio tendrán vida inmortal<br /><br />porque en la historia un nombre eternamente brilla<br />al lado de Cervantes, Molina y Garcilaso<br />el nombre de aquel vate, héroe y mártir: Rizal<br /><br />1915fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-87568705018130678922009-02-16T14:51:00.000-08:002009-02-16T15:47:59.688-08:00La romería de la muerte, de Manuel BernabéCabizbajos, taciturnos, con espíritu cansino<br />inclinados, como la hoja de la mies<br />van descalzos mis hermanos, a la vera del camino<br />con la lágrima en los ojos, con la sangre en los pies.<br />Macilentos, cual la caña exprimida de verano<br />desgreñados, ojos huérfanos de luz<br />¡Quien los viera juraría no ver sombra de un hermano!<br />¡Más parecen nuevos Cristos desclavados de la cruz!<br /><br />Son vencidos y caminan sin banderas<br />son vencidos y el azote les flagela los costados.<br />A su lado van las fieras<br />bandoleros con disfraces de soldados.<br />Son agudo de clarines<br />pantominas de grandeza, gestos ruines<br />alaridos de jauría, roncas voces<br />que los bárbaros son mas fieros que Caínes<br />dando vivas, dando gritos, dando coces<br /><br />Y los pobres van cayendo uno a uno<br />como pétalos sangrientos de las ramas florecidas<br />la agonía del ayuno, el temblor de las heridas<br />rostro pálido<br />brazo escuálido<br />cuerpo inválido<br />frente a las hordas de Atila<br />que cabriolan con fulgores malsanos en la pupila<br /><br />La apretada caravana en su pena se sumerge y se agobia<br />¿dónde el padre? ¿ y la madre ? ¿ y la hermana?<br />¿y la novia?<br />El vencido llama al cielo, pero el cielo no responde<br />_¿dónde han ido mis amores? ¿dónde? ¿dónde?fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-74761311163133970802009-02-16T14:38:00.000-08:002009-02-16T14:50:02.272-08:00Paisaje filipino, de Cecilio ApóstolEl sol en ebriedad suprema el suelo muerde<br />porque todo en la hora canicular concuerde<br />ni un hálito de brisa cruza la extensa y verde<br />paz del campo, ni un ave en el azul se pierde<br /><br />Un mango aislado eleva su centenaria fronda<br />junto a un punso enano de giba aguda y monda<br />que las hormigas alzan para que en él esconda<br />el nuno vigilante que por las mieses ronda<br /><br />Lejos corre, seguida del crío, una potranca<br />un carabao lustroso en un charco se estanca<br />en su lomo una garza hace una nota blanca<br /><br />Un río desenrosca las eses de su tripa<br />y asoma, allá donde su curva se disipa<br />las manchas trapeciales de los techos de nipafonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-7105853392708925082009-02-16T14:10:00.000-08:002009-02-18T12:52:43.706-08:00Filipinas a España, de Manuel BernabéLa dulce hija, postrándose de hinojos<br />dice a la madre, al tiempo que sus ojos<br />leve cendal de lágrimas empaña<br />_Dios ha dispuesto el término del plazo<br />y ya es la hora de romper el lazo<br />que nos unió tres siglos ¡Madre España!<br /><br />¡Madre, sí, madre! Sobre mi haz tendido<br />va fermentando el anhelar dormido<br />y el germen abonado se agiganta.<br />La gratitud es flor del alma mía<br />y no muere la clásica hidalguía<br />do se yergue tu cruz, tres veces santa<br /><br />Puede venir el águila altanera<br />y hundir el corvo pico en la bandera<br />de gualda y oro que nos da alegría.<br />Podrán poner a mi garganta un nudo<br />que aun cuando el labio se retuerza mudo<br />podrá gritar el alma: ¡<em>Madre mía</em>!<br /><br />Dichoso instante aquel que vio a las olas<br />dialogar con las naves españolas<br />llevando a Limasawa a Magallanes.<br />De entonces a hoy, portentos mil se han visto<br />y es que el poder de España arraiga en Cristo<br />manso y sin hiel, multiplicando panes<br /><br />Soberbio es tu ideal, como tu gloria.<br />Largos siglos ataste la victoria<br />al carro de tu vieja monarquia.<br />¿Cómo no amar tu gesta no igualada<br />si en las fronteras que humilló tu espada<br />el gran disco del sol no se ponía?<br /><br />Más no es la espada omnipotente solo<br />la que al brillar de uno al otro polo<br />obró cien maravillas en el llano:<br />es la esencia vital de las Españas<br />que al invadir palacios y cabañas<br />prestó eficacia al ideal cristiano<br /><br />Quien empuñó con varonil denuedo<br />en los tiempos de Lope y de Quevedo<br />el cetro de oro y el blasón divino.<br />Quien sembró fe en la individual conciencia<br />decoro en la mujer, que es otra herencia<br />luz en las mentes y oro en el camino<br /><br />La que duerme arrullada por el cántico<br />de las ingentes olas del Atlántico<br />la que empujó a Colón hasta la entraña<br />del mundo nuevo, que copió su hechura<br />la que llevó a los pueblos fe y cultura<br />y auras de libertad... esa es España<br /><br />España, la invencible soñadora<br />que monta Rocinantes a deshora<br />los toros lidia, viste la mantilla<br />ama la jota y al danzón se entrega<br />mas cuyo acero no es la hoz que siega<br />sino arado que pone la semilla<br /><br />La patria de la vid y la verbena<br />que fía a la guitarra su honda pena<br />dominadora de la Argel moruna<br />la que las tierras incas civiliza<br />hidalgo pueblo, de otros cien nodriza<br />única madre que meció mi cuna<br /><br />Los claustros de tus Cuevas y tus Prados<br />noche y día mirándose atestados<br />de hijos nativos, del saber amantes<br />hiciste héroes y armaste caballeros<br />y aun late en el cantar de mis troveros<br />la dulcísima lengua de Cervantes<br /><br />¡Oh rica fabla espiritual! Simula<br />cordaje de una cítara que ondula<br />es blanca arcilla y música ese idioma<br />claro choque de perlas y corales<br />remedo de los coros celestiales<br />que de Dios mismo su raigambre toma<br /><br />Si lloro, se unifica con el llanto<br />que impregna mi kundiman cuando canto<br />y es en la liza imprecación alerta.<br />Podrán hurtarme mis veneros de oro<br />pero al perder tan singular tesoro<br />es que habré sido traicionada y muerta<br /><br />Rizal, Mabini, Del Rosario y Luna<br />son vástagos comunes. La fortuna<br />dejó en su frente un evangelio escrito.<br />Si yo les di mi maternal entraña<br />no empresa mía fue sino de España<br />fundir el alma en su troquel bendito<br /><br />La Cruz de Arrechedera y Urdaneta<br />está en mis cielos; tabla es que sujeta<br />cuando zozobra, al bien. Porque a despecho<br />de las más encontradas ambiciones<br />tu religión, tu fe, tus tradiciones<br />han abrigo recóndito en mi pecho<br /><br />En el curso del tiempo desenvuelto<br />tú, España, volverás. ¿Qué amor no ha vuelto<br />presa en la red del propio bien perdido?<br />Serás un ave enferma de añoranza<br />que va a volar cuando la noche avanza<br />en dirección al solitario nido<br /><br />Si están ahítos de llorar tus ojos<br />y en otros días te causara enojos<br />la era de paz y de perdón se inicie.<br />¡Oh, qué mejor que tras la despedida<br />seamos como el agua en dos partida<br />que se torna a juntar en la planicie!<br /><br />Mientras la vista atónita vislumbra<br />la luz de redención en la penumbra<br />e hijos del alma apréstanse a las lides<br />¡Ve, madre! Y digan valles y colinas<br />¡Gloria a la madre España en Filipinas!<br />¡Loor eterno a ti! Tú no me olvides<br /><br />1913fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-87597067871409701302009-02-15T16:15:00.000-08:002009-02-15T16:27:54.229-08:00La bandera, de Fernando María GuerreroCorre el torrente alborotado y ciego<br />y el Derecho parece una quimera<br />pero aún hay fe, y allí donde yo llego<br />ha de llegar conmigo mi bandera<br /><br />Es bandera muy santa. Me la dieron<br />hombres ya muertos de mi propia raza.<br />Ellos la amaron mucho y defendieron<br />cuando tronó el insulto o la amenaza<br /><br />Y hoy la defiendo yo. No es el torrente<br />la fuerza superior que la derribe<br />esa bandera es algo omnipotente<br />que flota y obsesiona y siempre vive<br /><br />¡Vivirá!....Si algún día de mis manos<br />un golpe del azar la desprendiera<br />en pos de mi vendrían mis hermanos<br />a tremolar de nuevo esa bandera<br /><br />Fija en la brecha está. Ese es su puesto<br />allí la encontrarán otras edades<br />allí irán a besar su hierro enhiesto<br />rayos de gloria o fieras tempestades<br /><br />Allí la mirarán siempre clavada<br />flameando al sol las esperanzas mías<br />vieja quizá, pero jamás hollada<br />jamás vendida por el bravo Elías<br /><br />Y Elias es mi hermano. Su firmeza<br />arde en todas las almas filipinas<br />y satura de fe nuestra cabezas,<br />ya las ciñan de flores o de espinas<br /><br />¿Y qué brazo mejor que el brazo hermano<br />para sostén de la bandera amada?<br />Ese la salvaría del pantano<br />como la salva ahora y la levanta<br /><br />¡Aleémosla!....Que llegue hasta los cielos<br />que ondee y que restalle muy arriba<br />que cubra con su gloria nuestros duelos<br />y que mantenga la esperanza viva<br /><br />Y aunque ciego el raudal se precipite<br />y parezca el derecho una quimera<br />nadie mientras la fe no se marchite<br />podrá decir que ha muerto esa bandera.fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-58298651138278622772009-02-15T16:03:00.000-08:002009-02-15T16:08:17.384-08:00A la patria, de Francisco VillanuevaHermosa patria mía, amor de mis amores<br />¿sabes por qué mi acento hoy se dirije a ti<br />y por qué el más indigno entre tus trovadores<br />gozoso te contempla con loco frenesí?<br /><br />Es porque se anonada la ardiente fantasía<br />ante el recuerdo santo del poema de tu ayer<br />es porque sueño verte alta la frente un día<br />señora del Oriente, reuniendo por doquier<br /><br />Entonces tu alma enseña envolverá tu suelo<br />tus plácidos hogares con ella se ornarán<br />de oro, de azul y grana se teñirá tu cielo<br />y oro y azul y grana tus campos mostrarán<br /><br />Tus ínclitos donceles, tus vírgenes amadas<br />celebrarán ansiosos tu página inmortal<br />y temblarán tus montes, rosales, y cascadas<br />a los melifluos sones de tu himno nacional<br /><br />Desde su trono el mundo levantará su frente<br />para entonar un himno, un himno en tu loor!<br />Gloria para la patria ya libre e independiente<br />que luce a cuatro vientos la enseña tricolor!<br /><br />Un amor acendrado ¡oh patria! por ti siento<br />tuyos son mis laureles, es tuya mi ilusión<br />¡Libre desea verte el claro entendimiento!<br />¡Libre desea verte el noble corazón!<br /><br />1913fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-53786636258171069222009-02-15T15:58:00.000-08:002009-02-15T16:01:41.540-08:00A Rizal, de Juan F. Salazar¡Salud, campeón, que en desigual batalla<br />por la patria luchaste cual dios-hombre!<br />Hoy solamente al pronunciar tu nombre<br />tu nombre dice lo que el labio calla<br /><br />El patriótico ardor que en tu obra estalla<br />vibrando sin cesar al mundo asombre<br />en nuestra patria tu inmortal renombre<br />no encuentra diques, ni barreras halla<br /><br />Yérguete audaz, espíritu gigante<br />del noble Ibarra la existencia errante<br />fue de tu vida encarnación y ejemplo<br /><br />¡Salud, Rizal! Que no has luchado en vano...<br />¡Para ti en cada ser habrá un hermano<br />y en cada corazón un sacro templo!<br /><br />1912fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-40115551175787749132009-02-15T15:48:00.000-08:002009-02-15T15:52:54.786-08:00Que Dios le perdone al salvaje..., de Carlos CalaoQue Dios le perdone al salvaje<br />al pagano de Mactán<br />que no entendió la palabra<br />de Dios en el capitán<br />Magallanes, a quien muerte<br />dio por orden de Satán<br />el enemigo de Cristo<br />el ponsoñoso alacrán<br /><br />El capitán Magallanes<br />los invitó a servir<br />al verdadero Dios nuestro<br />mas aquel régulo vil<br />llamado Cali Pulaco<br />no quiso ver ni sentir<br />la dádiva de la fe<br />y nos lo hizo morir<br /><br />1614fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-33353494042322534662009-02-15T15:41:00.000-08:002009-02-15T15:46:29.894-08:00Aunque no me digas, de Evangelina GuerreroYo sé que me quieres aunque no me digas<br />yo sé que me tienes cautiva por siempre<br />en las fuertes redes de tu propia vida<br />celeste incensario de un sueño perenne<br /><br />Aunque no me digas que sin mí no vives<br />mi anhelo me dice que todo es verdad<br />que ciñen tu frente muchas flores tristes<br />si agobiado piensas en un despertar<br /><br />Yo, ¿qué he de decirte? Te miro...y me callo<br />tú ya bien comprendes mis hondos silencios<br />la estrella hecha flor del cielo lejano<br />contempla en las aguas su sombra sin miedos<br /><br />Deja que mi pena repose en tu pecho<br />como fatigada paloma viajera<br />a la sombra tibia del tranquilo huerto<br />de la paz gocemos la caricia buena<br /><br />Que sea el reposo canción, serenata<br />mientras hilvanamos en la hora serena<br />los sueños maduros de épocas pasadas<br />que llenan de efluvios nuestras almas viejas<br /><br />Aunque no me digas que piensas en mí<br />que toda me guardas en tu corazón<br />volveré al recuerdo y hallándote a ti<br />aunque no me digas sabré que es amorfonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-49804370246154858092009-02-15T15:31:00.000-08:002009-02-15T15:40:00.584-08:00Dos pensamientos, de José PalmaI<br />En esta noche sombría<br />¡oh patria de mis amores!<br />yo lloro con tus dolores<br />y sufro con tu agonía.<br />Podrá la borrasca impía<br />en sus ondas sepultarte<br />pero yo nunca olvidarte<br />porque mis delirios son<br />tenerte en mi corazón<br />y vivir para adorarte<br /><br />II<br />Hoy brotan mustias del cielo<br />nuestras dulces alboradas<br />porque están ensangrentadas<br />las pampas de nuestro suelo.<br />Cuando en su versátil vuelo<br />el aura llega al ramaje<br />en su trémulo cordaje<br />suspira insólitas penas<br />y ¡ay! que es ruido de cadenas<br />ese ruido de follaje<br /><br />1900fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-58334371857573983812009-02-15T15:01:00.000-08:002009-02-15T15:27:24.370-08:00A la patria, de Emilio Jacinto¡Salve oh patria que adoro, amor de mis amores<br />que Natura de tantos tesoros prodigó<br />vergel do son más suaves y gentiles las flores<br />donde el alba se asoma con más bellos colores<br />donde el poeta contempla delicias que soñó!<br /><br />¡Salve oh reina de encantos, Filipinas querida<br />resplandeciente Venus, tierra amada y sin par<br />región de luz, colores, poesía, fragancias, vida<br />región de ricos frutos y de armonías, mecida<br />por la brisa y los dulces murmullos de la mar!<br /><br />Preciosísima y blanca perla del mar de Oriente<br />edén esplendoroso de refulgente sol<br />yo te saludo ansioso y adoración ardiente<br />te rinde el alma mía, que es su deseo vehemente<br />verte sin amarguras, sin el yugo español<br /><br />En medio de tus galas, gimes entre cadenas<br />la libertad lo es todo y estás sin libertad<br />para aliviar oh patria tu padecer, tus penas<br />gustoso diera toda la sangre de mis venas<br />durmiera como duermen tantos la eternidad<br /><br />El justo inalienable derecho que te asiste<br />palabra vana es sólo, sarcasmo, burla cruel<br />la justicia es quimera para tu suerte triste<br />esclava y sin embargo ser reina mereciste<br />goces das al verdugo que en cambio te da hiel<br /><br />¿Y de qué sirve ¡ay patria! triste, desventurada<br />que sea límpido y puro tu cielo de zafir<br />que tu luna se ostente con luz más argentada<br />de que sirve si en tanto lloras esclavizada<br />si cuatro siglos hace que llevas de sufrir?<br /><br />¿De que sirve que cubran tus campos tantas flores<br />que en tus selvas se oiga al pájaro trinar<br />si el aire que transporta sus cantos, sus olores<br />en alas también lleva quejidos y clamores<br />que el alma sobrecogen y al hombre hacen pensar?<br /><br />¿De qué sirve que, perla de virginal pureza<br />luzcas en tu blancura la riqueza oriental<br />si toda tu hermosura, si toda tu belleza<br />en mortíferos hierros de sin igual dureza<br />engastan los tiranos gozándose en tu mal?<br /><br />¿De qué sirve que asombre tu exuberante suelo<br />produciendo sabrosos frutos y frutos mil<br />si al fin cuanto cobija tu esplendoroso cielo<br />el hispano declara que es suyo y sin recelo<br />su derecho proclama con insolencia vil?<br /><br />Mas el silencio acaba y la senil paciencia<br />que la hora ya ha sonado de combatir por ti<br />para aplastar sin miedo, de frente, sin clemencia<br />la sierpe que envenena tu mísera existencia<br />arrastrando la muerte, nos tienes, patria, aquí.<br /><br />La madre idolatrada, la esposa que adoramos<br />el hijo que es pedazo de nuestro corazón<br />por defender tu causa todo lo abandonamos<br />esperanzas y amores, la dicha que anhelamos<br />todos nuestros ensueños, toda nuestra ilusión.<br /><br />Surgen de todas partes los héroes por encanto<br />en sacro amor ardiendo, radiantes de virtud<br />hasta morir no cejan, y expiran. Entre tanto<br />que fervientes pronuncian, patria, tu nombre santo<br />su último aliento exhalan deseándote salud.<br /><br />Y así cual las estrellas del cielo numerosas<br />por ti se sacrifican mil vidas sin dolor<br />y al oir de los combates las cargas horrorosas<br />rogando porque vuelvan tus huestes victoriosas<br />oran niños, mujeres y ancianos con fervor<br /><br />Con saña que horroriza, indecibles torturas,<br />_porque tanto te amaron y desearon tu bien_<br />cuantos mártires sufren; más en sus almas puras<br />te bendicen en medio de angustias y amarguras<br />y si les dan la muerte bendícente también<br /><br />No importa que sucumban a cientos, a millones<br />tus hijos en lucha tremenda y desigual<br />y su preciosa sangre se vierta y forme mares<br />no importa si defienden a ti y a sus hogares<br />si por luchar perecen, su destino fatal<br /><br />No importa que suframos destierros y prisiones<br />tormentos infernales con salvaje furor<br />ante el altar sagrado que en nuestros corazones<br />juntos te hemos alzado, sin mancha de pasiones<br />juramentos te hicieron el alma y el honor<br /><br />Si al terminar la lucha con laureles de gloria<br />nuestra obra y sacrificios corona el triunfo al fin<br />las edades futuras harán de ti memoria<br />y reina de esplendores, sin manchas ya ni escoria<br />te admirarán los pueblos del mundo en el confín<br /><br />Ya en tu cielo brillando el claro y nuevo día<br />respirando venturas, amor y libertad<br />de los que caído hubieren en la noche sombría<br />no te olvides, que aun bajo la humilde tumba fría<br />se sentirán felices por tu felicidad<br /><br />Pero si la victoria favorece al hispano<br />y adversa te es la suerte en la actual ocasión<br />no importa: seguiremos llamándonos <em>hermano</em><br />que habrá libertadores mientras haya tirano<br />la fe vivirá mientras palpite el corazón<br /><br />Y la labor penosa en la calma aparente<br />que al huracán precede y volverá a bramar<br />con la tarea siguiendo más firme, más prudente<br />provocará otra lucha aun más tenaz y ardiente<br />hasta que consigamos tus lágrimas secar<br /><br />¡Oh patria idolatrada, cuanto más afligida<br />y angustiada te vemos te amamos más y más<br />no pierdas la esperanza; de la profunda herida<br />siempre brotará sangre, mientras tengamos vida<br />nunca te olvidaremos: ¡jamás, jamás, jamás!<br /><br />1897fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-8127847548479336602009-02-15T14:48:00.000-08:002009-02-15T14:55:34.852-08:00El que en mi patria se muera..., de Anselmo de JesúsEl que en mi patria se muera<br />no tendrá en la tumba frío<br />que en ella hasta el cementerio<br />lo besa el sol con cariño<br /><br />No es tan villano el hijo<br />que a su madre abandona<br />como el que de su patria<br />en renegar se honra<br /><br />La arrogante Filipinas<br />es una discreta dama<br />a quien el harem repugna<br />y seduce la cabaña<br /><br />Ante el bárbaro poder<br />de los modernos cañones<br />la fraternidad ha muerto<br />para siempre entre los hombres<br /><br /> 1899fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1993845806503364784.post-1312727509485689242009-02-15T14:31:00.001-08:002009-02-17T07:46:22.026-08:00A nuestro señor Don Quijote de la Mancha, de Jesús BalmoriSeñor de los poetas, de los desventurados<br />de todos los de ensueño de libertad turbados<br />de los que han hambre y sed de justicia en la tierra.<br />Señor de los esclavos, señor de las zagalas<br />en cuya frente baten las águilas sus alas<br />y en cuyo pecho España su corazón encierra<br /><br />En la vida que es triste, que es llena de amargura<br />y que solo el amor salpica de ventura<br />como a ingrata doncella amante dadivoso<br />¿Qué corazón que suena, qué espíritu que adora<br />no convierte en princesa la humilde labradora<br />y no cree que Aldonza es la flor del Toboso?<br /><br />Aún seguimos soñando castillos las posadas,<br />ejércitos de príncipes altivos las mesnadas<br />jardines encantados los páramos sin dueño.<br />Y en todos los instantes y en todos los caminos<br />todos vamos cayendo por luchar con molinos<br />y a todos nos destrozan las aspas del ensueño!<br /><br />¿Qué sería del mundo sin el halo divino<br />que nos cubre lo mismo que el yelmo de Mambrino?<br />¿Qué sería la vida sin la dulce poesía<br />que ciega nuestros ojos con sus flotantes tules<br />para llenar el alma de límites azules<br />y partir con un Sancho el pan de cada dia?<br /><br />¡Oh señor, ve que es cosa de gran desesperanza<br />salir por esos campos empuñando la lanza<br />a desfacer entuertos en sin igual empresa!<br />¡Luchar con la quimera hasta rendir los brazos<br />y azotarse las carnes hasta hacerlas pedazos<br />por romper el encanto que aduerme a una princesa!<br /><br />Pero todos lo hacemos. Todos siguen de trote<br />no hay un hijo de España que no sea Quijote<br />y aunque vaya soñando, no haga el bien por doquiera.<br />Destrozado y herido le hallarán en la vida,<br />pero no habrá una herida más ideal que su herida<br />ni habrá estrella más alta que su noble quimera<br /><br />Nada importa el que clama que su esfuerzo es locura<br />que es inútil su arrojo, que es fatal su aventura<br />¡Don Quijote discute todo eso con su lanza!<br />Y en tanto va ensartando malandrines follones<br />cargado de esperanzas, de ensueños, de visiones<br />por los campos del mundo avanza, avanza, avanza...<br /><br />A su paso se llenan de flores los caminos<br />se abren todas las ventas, se callan los molinos<br />y aunque por todo oro lleve su sola historia<br />ante su porte triste, soberbio, vagabundo<br />el sol se para en lo alto de la frente del mundo<br />y como una campana de luz repica a gloria<br /><br />1920fonsucuhttp://www.blogger.com/profile/01178230352131699741noreply@blogger.com0